Penya des Migdia en Mallorca

Sube a Penya des Migdia en Mallorca

Si buscas una ruta en Mallorca que lo tenga todo —historia, aventura, naturaleza y unas vistas que te van a dejar sin palabras—, la excursión a la Penya des Migdia —también conocida como Penya Rotja— desde la Ermita de la Victoria en Alcudia es un plan perfecto.

Es una caminata corta pero intensa, con rincones llenos de curiosidades y un final de infarto a 354 metros sobre el nivel del mar; aquí te espera un mirador con panorámicas de 360° sobre la costa norte de la isla.

Eso sí, no es un paseo cualquiera… el último tramo tiene pasos estrechos y cierta peligrosidad. ¿Te atreves?

ÍNDICE

Cómo llegar a Penya des Migdia en Mallorca

El punto de partida de la excursión está en el aparcamiento de la Ermita de la Victoria, a unos 7 kilómetros del centro de Alcudia. Para llegar en coche tienes que tomar la carretera que atraviesa la urbanización de Mal Pas, continuar en dirección al albergue de la Victoria y seguir hasta la zona de la playa de s’Illot. Unos minutos más de trayecto y el camino termina en el aparcamiento junto a la ermita, donde podrás dejar el vehículo —totalmente gratis— y comenzar la caminata.

El acceso no es complicado de localizar, pero lo suyo es que lleves batería para poner el GPS si lo necesitas porque no es de las rutas por Mallorca más transitadas.

Cómo es la ruta de senderismo a la Penya des Migdia

La excursión a la Penya des Migdia es corta, pero no te confíes porque es de esas rutas que combinan tramos fáciles con otros mucho más exigentes. En total son unos 4,7 kilómetros de ida y vuelta, con un desnivel moderado que se traduce en unas dos horas y media de caminata.

El inicio es suave, por una pista forestal, pero pronto vas a toparte con los primeros repechos. Tras pasar por Ses Tres Creus, el sendero se estrecha y se asoma al acantilado, ofreciendo unas vistas espectaculares sobre la bahía de Pollença y Formentor. Y aquí, ¡cuidado! Sobre todo si vas con niños o si el día es ventoso.

El tramo final es el más exigente; tiene una subida empinada que te va a obligar a trepar un poco con las manos y a seguir las marcas azules pintadas en la roca. El esfuerzo se ve recompensado con lo que te vas a encontrar.

Qué ver durante la ruta a la Penya des Migdia

La caminata hasta la cima de la Penya des Migdia en Mallorca no solo va de subir y sudar un poco, también es un recorrido lleno de rincones curiosos, paisajes impresionantes e historia. A continuación te contamos cuáles son los puntos clave que te vas a ir encontrando por el camino.

La ermita de Santa Victoria

El punto de partida de la excursión y primer alto “con historia” es este: la ermita de Santa Victoria, un oratorio del siglo XIV de carácter defensivo —con muros gruesos y planta rectangular de una sola nave con bóveda de cañón—. Dentro custodia un retablo barroco de Miquel Riutort y la imagen gótica de la Virgen de la Victoria —la patrona de Alcudia—.

Si te coincide estar por la zona en julio, aquí se celebra la fiesta popular con subida a pie, bailes y ofrenda de ramos de manzanilla.

Ses Tres Creus

A los pocos minutos de comenzar la subida vas a toparte con este rincón simbólico. En una explanada verás dos cruces de madera y una de piedra, que según la tradición marcan el lugar donde se halló la Virgen de la Victoria. Además, es la primera gran parada para disfrutar de las vistas hacia la bahía de Alcudia.

El sendero junto al acantilado

Desde Ses Tres Creus el camino se va afinando; irás pegado a la ladera. Es un tramo impresionante, donde se ven la bahía de Pollença, la península de Formentor y buena parte de la Serra de Tramuntana. Eso sí, toca avanzar con precaución.

El túnel de piedra

Uno de los momentos más especiales de la ruta es atravesar este paso de piedra de más de 400 años abierto en la roca para comunicar los dos lados de la montaña. Al cruzarlo, la perspectiva cambia. De repente te encuentras con vistas hacia Cap Pinar y a antiguas construcciones defensivas.

Penyal-des-Migdia

Los restos militares de Penya des Migdia

Nada más superar el túnel encontrarás vestigios de la época en que Mallorca debía defenderse de corsarios y piratas. Hay restos de una caseta de vigilancia, un aljibe para recoger agua de lluvia y hasta un horno de balas rojas, que se utilizaba para calentar proyectiles de cañón.

El cañón de Penya des Migdia y la cima

El último esfuerzo te llevará a trepar entre rocas siguiendo los puntos azules hasta la explanada de la cima. Allí te espera el Canó des Moro, un cañón de bronce del siglo XVII colocado en el 1630. Y por supuesto, la mejor recompensa: un mirador natural a 354 metros de altitud.

El tramo con cadenas

Un poco más adelante, el camino se vuelve más estrecho y expuesto, pero aquí encontrarás cadenas metálicas para ayudarte a superar el paso. No es complicado, pero se agradece tener ese punto de apoyo para avanzar con seguridad.

Penyal-des-Migdia-Mallorca

Qué ver en los alrededores

Hacer la ruta a la Penya des Migdia ya es un planazo, pero lo mejor es que los alrededores están llenos de lugares que merecen una parada. Muy cerca tienes Cala Sant Vicenç, con sus aguas cristalinas y sus pequeñas calas de arena y roca, perfectas para darte un chapuzón.

A pocos kilómetros está Pollença, uno de los pueblos más bonitos de Mallorca. Pasear por su centro histórico, subir los 365 escalones del Calvari o tomar algo en su plaza mayor es la forma ideal de rematar el día. Y si sigues la carretera de Formentor, los miradores y el Faro de Formentor te regalarán otra perspectiva de la isla.

Un poco más hacia el interior, otro planazo es visitar Inca, considerada la capital del calzado y la piel en Mallorca. Allí encontrarás tiendas y fábricas donde comprar productos locales de gran calidad, además de un centro histórico muy animado.

Uno de sus atractivos es la Feria de Inca, una cita anual que convierte el pueblo en un hervidero de mercados, música, tradiciones y mucho ambiente local durante octubre y noviembre.

Y si te apetece algo diferente, subirse al tren de Sóller es como viajar en el tiempo. Este histórico ferrocarril de madera recorre la Serra de Tramuntana entre paisajes de montaña y naranjales hasta llegar al precioso puerto de Sóller, donde puedes completar la experiencia cenando en una taberna tradicional.

Como ves, la Penya des Migdia puede ser la excusa perfecta para planear un día —o incluso un fin de semana— lleno de cosas que hacer.

visitar-calas-mallorca-octubre

¿Por qué elegir Penya des Migdia en Mallorca?

La Penya des Migdia es una de esas rutas que justifican por sí solas un viaje a Mallorca: corta pero intensa, con paisajes que se graban en la memoria y ese cañón espectacular que le da un punto de aventura.

Y ya sabes, lo ideal es no hacerla con prisas. Lo mejor es quedarse a dormir cerca para disfrutarla sin agobios y aprovechar también los pueblos y calas de los alrededores. En Ideal Properties tenemos alojamientos con encanto en la zona, perfectos para convertir tu excursión en una escapada redonda.

¿Echas un ojo a nuestra web y reservas el tuyo?